Por GABRIELA SELSER,Associated Press 
MANAGUA (AP) — El papa Francisco levantó una prohibición impuesta en 1983 al sacerdote y poeta nicaragüense Ernesto Cardenal que le impedía realizar actividades pastorales por su compromiso político con los sandinistas durante la revolución.
Un comunicado firmado por el nuncio apostólico nicaragüense Waldemar Stanislaw Sommertag, al que tuvo acceso The Associated Press, reveló que el Santo Padre “concedió con benevolencia la absolución de todas las censuras canónicas impuestas al reverendo padre Ernesto Cardenal”.
La decisión papal responde a una solicitud que el reconocido poeta, de 94 años, le presentó recientemente a través del nuncio, agregó el informe.
El comunicado destacó que Cardenal ha estado durante 35 años bajo suspensión del ejercicio sacerdotal y se ha abstenido de realizar actividad pastoral alguna. “Además, había abandonado desde hace muchos años todo compromiso político”, refirió el documento.
La sanción a Cardenal le fue impuesta en 1983 por el entonces papa Juan Pablo II con el argumento de que no debía ocupar “cargos políticos”. El religioso fue ministro de Cultura durante el primer gobierno sandinista (1979-1990).
La misma prohibición se le aplicó también al entonces canciller Miguel D’Escoto y al ministro de Educación Fernando Cardenal, hermano del poeta. A ambos sacerdotes se les retiró la sanción años más tarde.
El autor de “Salmos” y “Epigramas”, entre una vasta obra literaria, recibió la noticia desde su lecho de enfermo en un hospital de Managua donde permanece desde hace varios días en estado delicado pero estable, dijo a AP su asistente personal, Luz Marina Acosta.
Acosta reveló también que el nuncio Sommertag visitó a Cardenal la víspera y ofició una misa en la habitación del hospital donde convalece. “Fue muy emotivo y el padre estuvo muy contento”, afirmó.
*Ernesto Cardenal, tiene 94 años y está hospitalizado desde la semana pasada por una afección renal,estaba impedido de administrar los sacramentos desde hace casi 35 años tras la sanción dada por el fallecido Juan Pablo II debido a su militancia política.
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